El Vía Crucis volvió a congregar a un incontable número de personas en una Estación de Penitencia que se ha convertido casi en un día mas de Semana Santa.
El ambiente primaveral de la tarde del Viernes de Dolores presagiaba que la celebración del Vía Crucis del Silencio iba a congregar un importante número de personas. Y así fue. La agradable temperatura y la fuerte devoción que atesora el Cristo de la Salud y Misericordia, propiciaron un Vía Crucis realmente emotivo que respondío claramente al sentir tan profundo de nuestra Cofradía.
La jornada comenzó con la llegada de los hermanos a la Casa Hermandad en torno a las 21:30 horas. Mientras tanto, miembros de la Junta de Gobierno se dirigían a San Mateo para situar a nuestro Titular en las escaleras del presbiterio a la espera del inicio del tradicional besa pié previo al Vía Crucis.
A las 22:00 horas, la Hermandad se dirigió hacia la Parroquia. Tras su entrada, lo hizo la Cuadrilla de Santeros encabezada por su manijero, Lucas Cruces, y todas las personas que quisieron participar en el besa pié y que llenaron por completo los bancos del templo. Un besa pié que a cada año que pasa cuenta con un mayor número de personas que desean acercarse hasta la imagen del Silencio para besarle sus pies.
A las 23:00 horas en punto se iniciaba el Vía Crucis por las calles de Lucena con la salida, en primer lugar, de los más de 230 hermanos de la Cofradía en sus dos tramos, de tambor y de vela. Tras ellos, la imagen de nuestro Titular, sin andas o trono alguno, portada a hombros por dos cuadrillas de hermanos. Destacamos la presencia en un lugar destacado de D. Francisco Rodríguez Delgado, Tambor de Oro 2014, y otros hermanos fundadores que acompañaron al Señor del Silencio en todo momento.
Este año, la zona oeste de la ciudad era el objeto de la visita del Vía Crucis que en cada edición acerca al Cristo del Silencio a un barrio diferente de la ciudad en busca de los más desfavorecidos y los más desamparados. Las catorce estaciones se fueron sucediendo en un hermoso itinerario que transcurrió por Plaza Nueva (lateral sur), Las Torres, San Pedro, José de Mora Romero, El Peso, Martín Alonso, Catalina Marín, Muleros, Cabrillana, El Agua, Canalejas, Juan Palma, Plaza Nueva, a su templo.
A lo largo del recorrido se vivieron momentos de emoción, como la Quinta Estación en las mismas puertas de la Capilla de Nuestro Padre Jesús Nazareno, o la Décima Estación junto a la vivienda de nuestro recordado y añorado cofrade Gaspar Villa.
En todo momento, el público acompañó a la Hermandad y su Titular mostrando un absoluto respeto y recogimiento viviendo profundamente las estaciones según iban sucediéndose.
En torno a las 1 de la madrugada finalizaba el Vía Crucis de este año. Un Vía Crucis profundo e intenso y que la Cofradía tiene como uno de los actos más representativos y plenos del particular espíritu de caracteriza a nuestra Hermandad.
A continuación, algúno de los videos rescatados de youtube de nuestro Vía Crucis, y un extenso y completisimo reportaje fotografico obra de D. Juan Pérez con los momentos de la llegada de la
Hermandad a San Mateo, el Besapié al Cristo del Silencio, y finalmente el Vía Crucis. Desde esta web, nuestra gratitud por aportarnos tan magnifico reportaje.
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